En la actualidad, la seguridad personal es una de las más grandes preocupaciones que tenemos los venezolanos. En una encuesta reciente observamos que para el 80% de los encuestados la violencia y la inseguridad son los primeros problemas que enfrenta el país. No es de extrañar conseguir noticias aterradoras, como una que particularmente llamó mi atención esta semana; la cual decía que un adolescente en el Centro de Formación Integral de San Cristóbal recibió 70 puñaladas y luego fue decapitado y su cabeza fue lanzada al techo del reformatorio, el resto de la noticia terminaba diciendo que conjuntamente con este adolescente murieron dos hermanos de 16 y 14 años respectivamente con el 80% de su cuerpo calcinado.
¿Qué podemos observar en esta noticia? Los delitos cada día son mas y mas violentos, existe demasiado ensañamiento por parte de los que han cometido este asesinato, es decir no basta con lograr la muerte del individuo si no descargar niveles de odio que son dantescos, no descartamos que seguramente habrían problemas internos de este individuo con demás adolescentes recluidos, pero no es justificable tanta agresión.
De esto también desprendemos la idea del irrespeto que se tiene por la moral y las buenas costumbres que nos unen como sociedad, observamos que son adolescentes y ya no hay ningún respeto por la vida, por la convivencia, por la familia de este joven y al final de esta reflexión vemos que tampoco hay respeto por el cuerpo humano de un muchacho el cual luego de ser asesinado brutalmente, fue desmembrado y usado su cabeza como pelota y botarla a un techo. No es por ser moralistas pero son adolescentes, acaban de comenzar su vida, que les queda toda la vida por delante y ya han cometido crímenes que son totalmente crueles y prueba de que en ellos no hay sensibilidad humana.
En esta noticias que hemos estado comentando se señala que estos reformatorios son igual que las cárceles de adultos, donde corren armas, drogas y que se han formado mafias dentro de los recintos, algo que es totalmente injusto e inaceptable porque es el futuro de este país que se está jugando dentro de esas paredes, son muchachos que no tuvieron una educación eficiente, que probablemente no crecieron dentro de un hogar donde pudieron desarrollar una buena conducta de ciudadanos, es muy probable que hayan sufrido la pérdida de sus padres o que capaz sus padres no estuvieron pendientes de ellos para formarlos como se debió.
El Estado, al tenerlos bajo su custodia debe procurar cambiar todas esas actitudes violentas, incentivar el estudio, el respeto por los demás y sobre todo mantener un orden y respeto por las normas. Si se continua con este desorden gracias a la ineficiencia del Estado, siempre habrá una escuela de antisociales, criminológicamente se dice que la sociedad es el caldo de cultivo para crear los delincuentes, entendiendo que si la sociedad es violenta siempre tendrás una maquina de “malandros” y mucho más dentro de estos recintos penales, de este modo se considera urgente tomar medidas para corregir esta situación.
Amigos lectores, no podemos perder la capacidad de asombro, como se ha hecho costumbre escuchar y leer cifras tan altas sobre índices de violencia tomamos casi como normal esta situación, debemos recordar que detrás de cada persona que es asesinada o secuestrada hay una familia que sufre, que padece los embates de esta situación.
Como recomendación les diría que para que la sociedad cambie, debemos hacerlo nosotros primero.
No más violencia.
Twitter: @fdseguridad
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